Un trabajador de unos 40 años, Daniel Amante, que trabaja en el sector Tintas de la Casa de la Moneda, dió positivo al testo Covid, el viernes pasado. Daniel que hoy está internado en la clínica Anchorena, vive en al Barrio Padre Mugica, ex Villa 31.
Los trabajadores de la institución realizaron asambleas ante la poca información que recibían por parte de los directivos, y ante la ineficiente acción llevada a cabo: todos deben esperar lo que dice el protocolo enviado por el ministerio de Salud, cerca de 14 días para saber si tienen o no síntomas de contagio. Mientras tanto siguen trabajando, viajando en transportes públicos y viendo a sus familias. Todos posibles blancos de contagio.
Cuando se les pregunta: pero la prioridad del Gobierno en ésta pandemia no es la salud? responden. si, en la teoría, pero en la práctica parece que no.
No recibieron información concreta en tiempo y forma, por lo que estiman que el sector en donde trabaja Amante fue puesto en cuarentena, sin embargo todos saben que el mismo anduvo por pasillos, compartió espacios comunes con otras personas, y aún no surgió ningún otro caso positivo.
Denuncian irregularidades como la negación a realizar test masivos a todos los empleados; y falta de elementos de seguridad sanitaria. En Tintas trabajan cerca de 40 personas quienes a pesar del temor, y la falta de respuestas como tantos otras áreas del edificio deben ir a trabajar todos los días, sin saber si están o no contagiados ellos o sus familiares, o lo hayan hecho a personas que se cruzan en sus viajes.
Los gremios de la institución estatal (UPCN, ATE, APH) no han decidido aún que medidas tomar para reforzar la salud de todos los trabajadores, aunque en asamblea los mismos hicieron pedidos que no se cumplieron como ser cierre parcial o total del lugar para desinfección, elementos de control sanitario, test covid 19 masivo, etc..
